Pasan los días, avanza el curso y se aproxima un cambio de fase.
En este día también tendré un concierto con Jota Martínez y Abel García,con la colaboración especial de Pino De Vittorio, un grande de la música tradicional con una larga trayectória en la que ha interpretado desde la tradición musical de Puglia, con sus reconocibles tarantelas (muy representativas por cierto del Barroco) y también música barroca, ópera y proyectos más contemporáneos. Se lee en redes que ‘Pino de Vittorio es una especie de “Orfeo” de Nápoles’. Nos impactó a todos con su gran profesionalidad y su humanidad.
Este año la academia tenía como leit motiv las ‘Arrels’, raices. Queríamos que nuestro concierto, en el que ibamos a interpretar los temas de Mare Vostrum, un disco con el que celebrava mis 25 años de carrera profesional, resonara en las tablas del teatro de Morella. Especialmente orgullosa del trabajo porque en él nos invertimos a fondo los dos padres de la criatura y yo misma (sí, hay muchas formas de amor) al que alimenté en mi vientre y al que me unirá un cordón umbilical invisible, sutil, más fino que el aliento más pequeño…pero hecho de la sustancia que hace abundante la cabellera de la más fraguada hembra, esa que se sabe que alumbrará una progenie abundante y sana, de fortaleza envidiada. Para ello vinieron también Rosa Sanz, bailaora con gran experiencia y compañera con la que hemos recorrido ya muchos tramos del camino, siempre con la alegría en la cara, en las manos, en sus zapatos que hacen temblar escenarios. Fernando Depiaggi, portador de la tradición del Medio Oriente en sus percusiones y del ney, ese humilde instrumento de caña, un símbolo para los sufíes, cuyo máximo representante escribía este poema a él dedicado.
Escucha el ney, y la historia que cuenta,
como canta acerca de la separación:
Desde que me cortaron del cañaveral,
mi lamento ha hecho llorar a hombres y mujeres.
Deseo hallar un corazón desgarrado por la separación,
para hablarle del dolor del anhelo.
Todo el que se ha alejado de su origen,
añora el instante de la unión.
[…] Cuando la rosa se haya ido y el jardín esté marchito,
no podrás escuchar más la canción del ruiseñor.
El Amado lo es todo; el amante apenas un velo.
El Amado está viviendo; el amante es una cosa muerta.
Ama las voluntades de lo que traen estas palabras.
[…] Le pregunté al ney (flauta de caña):
¿de qué te lamentas?
¿cómo puedes gemir sin poseer lengua?
El ney respondió:
Me han separado del cañaveral
y ya no puedo vivir sin gemir y lamentarme
También estará en el concierto Mercedes Campello que nos dedicará un tiempo dentro del curso a explicarnos e intentar poner en pies y alma el giro místico, que los sufíes “Derviches Giróvagos“, realizan como una especie de meditación en movimiento llamada “semá” donde hombres (y actualmente, mujeres) giran sobre sí mismos acompañados por el ney y percusiones. Otra alumna, de otro curso, se sumará al nuestro para tratar de acercarse a los fundamentos de este ritual.
Será un día dedicado al elemento tierra y lo haremos en el interior de la iglesia de Sant Francesc, debajo de la grandiosa cúpula del siglo XIV, que muestra la belleza y sencillez del gótico original, así como una vista por los ventanales de la sierra por donde cruzan de tanto en tanto alguna rapaz al acecho de alguna presa por el picado de su vuelo.
Es el día de la tierra, y trabajamos sobre elementos orgánicos relacionados con este Reino de la MTCH a través del bazo, y estómago fuertemente vinculados con la alimentación que ya desde antiguo está considerada como medicina, basta recordar la máxima de que ‘el alimento sea tu medicina y tu medicina tu alimento’. Y vinculada a la energía de las que quieren ser madres. Situado en el centro de nuestro cuerpo, representa el hogar, el centro y coordina el paso de los líquidos y nutrientes transformando y transportando. Es como la madre que nutre y entrega los frutos de su producción.
Cuando trabajamos en la sala de profundis con el elemento Agua, trabajábamos con la esencia, esa energía transmitida por nuestros ancestros que no puede crecer, de hecho va menguando conforme avanza nuestra vida, pero de nosotros y nuestras circunstancias depende cuan rápido se agote esa reserva y qué calidad tenga, sería el ‘antiaging’ de nuestra estructura. Se habla de este Reino (el del agua) y sus componentes como raíz del cielo anterior porque sus potencialidades están generadas en base a la herencia. En el Elemento Tierra la energía se obtiene por los alimentos, considerando este reino como la raíz del cielo posterior (al nacimiento) y con esta energía sí podemos trabajar dependiendo la calidad de nuestra vida de ese trabajo personal de alimentación, respiración, emociones, sentimientos y su transformación o no en acciones . Su color está representado como el amarillo, el sabor dulce, la estación es el fin de verano o los 20 días iniciales de cada estación, su sentido es el gusto y su clima es el húmedo. Su fluido es la saliva, su orificio la boca y se manifiesta en los labios. Además el Bazo está relacionado con los músculos a nivel físico y el intelecto a nivel mental.
El Elemento Tierra es el elemento del tacto, del contacto físico. Así que continuamos con sesiones individualizadas a primera hora de la mañana con cada alumna de qicong, digitopuntura y masaje.
El día se acorta y pronto llega la noche y haciendo caso omiso de las enseñanzas me he alimentado solo de un trozo de pan y media copa de vino desde ayer. Ensayamos con Pino, también mis queridas alumnas que formarán parte del espectáculo dedicando cada día, en nuestro momento ‘aperitivo’ en la cafetería que más pareciera un antigua casa morisca con su patio interior y sus dos alturas con pasillos cubiertos y abiertos al centro, un rato a trabajar sobre las canciones en las que harán su colaboración.
Llega el momento de mostrar aquello que hemos aprendido, en el curso y en la vida.
Cada vez que uno se sube a un escenario cuenta tantísimas cosas como las que calla. Pero no se ve nada. Tantas luces en el escenario, vestidos largos, horas de prácticas y no se percibe nada más allá de la realidad, más o menos habitual, de un concierto más! En realidad lo que hemos aprendido comenzó a hacer efecto cuando trabajamos sobre las aguas, lo más esencial de cada una de nosotras en aquella ahora casi lejana sala, pero se verá reflejado en ellas una vez recuperen la calma. Y probablemente nadie notará el cambio operado sobre nuestras estructuras ni nos dirá aquello de ‘te veo tan cambiada’, pero las cosas nunca volverán a ser como fueron después de trabajar a tan profundo nivel, sobre las entrañas de cada tierra donde las vetas de agua más puras se cruzan con el fuego ígneo que brama y los minerales se agolpan y palpitan esperando el momento en que visibles, rutilantes, cegadores a la luz se hagan.
Gracias Rosa Sanz, Mercedes Campello, Angeles Subías, Sonia Delgado, Maite Gil, Patricia Álvarez, Beatriz Martínez, Fernando Depiaggi, Abel García, Jota Martínez y Pino De Vittorio.